viernes, 25 de septiembre de 2009

Primera semana

Al llegar a la Haya el Jueves 17 de Septiembre me acogió una chica de Couchsurfing cuyo nombre es Jen. Vino a recogerme en sus autito amarillo (digo autito porque era chiquitito) y me contó que en su casa también estaba alojando a un chico de Rumania. Nada más llegar a la casa enseguida hice miga con los dos, ya que descubri que ambos eran frikis de los juegos y las peliculas de ci-fi y fantasía.

El primer día conseguí una bici de carreras por 100 lerus, que si bien necesita algun arreglo, me parecia un buen precio ya que venia con candado en U incluido. Aqui sin bici no eres nadie, todo el mundo bicicletea y hay carril bici por todas partes. Es supercómodo y los conductores...te respetan!

El domingo me mudé a casa de mi amigo Iñaki, que está desde hace un tiempo aqui trabajando en la oficina de patentes europeas. El piso es grande, amueblado y equipado, y con él vive una chica alemana a la que aloja 3 meses a cambio de conversación en alemán. Y qué puedo decir de Iñaki...hasta ahora es un auténtico placer convivir con él. Aparte de su generosidad por alojarme, las risas en casa no faltan, ni las conversaciones interesantes ni la comida. Iñaki es de estos tipos que disfrutan la convivencia a base de compartir. Y la verdad es que funciona. La comida que hay en la casa es de los 3, la compre quien la compre, y siempre hay comida (de hecho ahora mismo nos cabe a duras penas). Y así con todas las cosas de la casa, cualquiera pone la lavadora, cualquiera la seca, cualquiera recoge la cocina...y todo sale la iniciativa de cada uno. Es curioso pero una vez que entras en una dinámica de "arrimar el hombro" se te llena el cuerpo de ganas de hacer algo por la casa, y en cuanto ves que algo es mejorable lo haces.
Además he de decir que Vera, la alemana, es majísima / copadísima, que para ser alemana le encanta hablar, reirse y compartir. E Iñaki es un gran cocinero, no solo le encanta y lo hace a menudo, sino que sus platos son deliciosos y tengo mucho que aprender de él en cuanto a gastronomía.

Y en cuanto al trabajo, la cosa marcha, la semana que viene tengo dos entrevistas y varias oportunidades más por ahí que estoy esperando que me contesten. El mercado aquí está bastante bien, y aunque no hablo holandés, parece ser que encontaré algo más o menos rápido.

Además, esta semana he salido a cenar casi todos los días con gente que me lo ha propuesto, casi todos a través de Couchsurfing. Desde luego me esta sirviendo de gran ayuda para crear una vida social en una ciudad nueva donde sólo conocía a una persona.

Conclusión: la cosa va viento en popa y a toda vela!

1 comentario:

Miky dijo...

Cuanto positivismo ^_^
Así da gusto...para cuando me acoges? :D