lunes, 18 de mayo de 2009

Bungee Jumping Video

Brasil

Despues de la aventura de Cuzco, me fui a Lima, donde conoci a los CouchSurfers y me encontre con Fernan, un argentino que habia conocido en Cuzco. Me aloje en casa de Helena, que vivia con su madre y que son dos amores de persona. Me trataron superbien, muy hospitalarias y muy buena gente. Fernán también, un crack en toda regla, risas, wii y compartiendo historias. Y que decir de los Couchsurfers y sus amigos, me trataron de 10, siempre con más planes que tiempo y poniendo toda la onda. Definitivamente, el tiempo que pasé en Lima fue de lo mejorcito de este viaje (en Córdoba también, no te me enfades Euge!).

Después fui a Rio de Janeiro, en Brasil, desde donde escribo estas líneas. Me alojo en casa de mi amigo Carlos, de Zaragoza, donde estoy como en mi propia casa. Hablando maño, comiendo cosicas españolas y recordando historietas de Mañolandia. El primer shock cultural al llegar a Río fue que por primera vez en 20 meses de viaje, estaba en un país donde no hablaban mi idioma. Uno no se da cuenta hasta que intenta pedir algo y no te entienden ni les entiendes, y además poca gente habla aquí inglés. Se tarda un poco en pillar el portugués brasileño, y poco a poco te vas acostumbrando a las palabras. Ahora, 2 semanas despues de mi llegada, ya soy capaz de defenderme en portugués, preguntar por direcciones, etc... Se aprende rápido gracias a su similitud con el español, pero aún asi todavía ellos aprenden más rapido el español que nosotros el portugués. Yo creo que sólo los paises angoparlantes son más lentos que los españoles aprendiendo idiomas.

En Río basicamente he estado descansando (como si estuviera muy cansado, jaja), yendo a la playa de Ipanema (bueno no mucho, ya sabéis que yo soy más de montaña), viendo el Cristo Redentor (lo de tener un Cristo de 38m de altura delante acojona!) disfrutando de los rincones de Río donde me lleva Carlos, comprando mi billete para España (llego el 25 de Junio a Madrid) y visitando un lugar paradisiaco que se llama Ilha Grande, donde sólo se puede llegar en barco u helicoptero (y vi 2!). Es una isla inmensa llena de playas espectaculares y jungla increible. Dentro de la isla te sientes como en "Lost", caminando por la jungla, viendo cascadas, rios, bajando a la playa, viendo los peces... La arena es totalmente blanca y limpia, y el agua cristalina. Es un lugar al que definitivamente pienso volver. Estuve caminando unas 4 horas ida y vuelta por la isla y tan solo hice un 5% del recorrido, y lo que vi me pareció espectacular.

Ahora toca vuelta a mi Buenos Aires querido, donde ya nada más llegar, tengo un asado, una noche friki, una invasion a Rosario, cenas prometidas... por algo me quedo un mes antes de volver a España...si es que sin trabajar, uno se lo pasa de puta madre!

Aqui las fotos de Brasil